Ya hice en otra ocasión tarjetas para las Chicas Corazón, que hacen cojines con forma de corazón para mujeres mastectomizadas.

Caridad me envió uno -lo que le agradezco mucho- para una amiga mía operada de cáncer de mama. Según ella, cuando lo probó, la forma que tienen alivia el dolor de la operación.

Junto con los corazones, en aquella ocasión, solicitaron que, las que pudieramos, hicieramos una tarjeta para acompañar el cojín-corazón. Siguen haciendo su labor, pero ahora no han pedido nada, aunque yo les he enviado algunas para continuar esa labor tan entrañable.

Espero que les gusten.

Más sencillos no pueden ser. Los vi hace unos días en el foro donde participo y me encantaron. Con el botón les di mi toque personal.

La base es un rollo de papel higiénico, hilo de bramante, una cinta de terciopelo rojo y el botón.


Los tiempos no están para tirar absolutamente nada….

Me encantan los portalápices o portaloquesea. Esta vez se me ocurrió (y no lo había visto antes) forrarlos con trozos de papel de periódico igual que hice con las cajas de zapatos.
Fueron un detalle para las hijas, María y Lucía de una prima muy querida para mi, Mari Nieves.





Como podéis ver, encima del papel de periódico, pegado con cola blanca, una vez seco, lo he entintado con Vintage Photo todo. Como es un elemento que se puede utilizar mucho, simplemente le he pegado parejas de flores de Martha Steward de varios tonos, incluso alguna cogida de un antiguo libro de mapas. Además hay alguna hoja y algún corazón troquelados directamente de las hojas de los platanus que están por toda la ciudad.

Nunca lo había hecho, pero al enseñarme mi hermana, probé a hacer el conjunto de plato decorado con servilleta y vela con el mismo motivo.
Alrededor del plato (también copiándome de mi hermana) pegué una cinta encadenada de color azul que combinaba bien con la servilleta y rematé pegando unas flores de ganchillos en los mismos tonos.

Como voy a paso tortuga, solamente he hecho una tarjeta navideña más que ahora veréis.


Además, he dado unos toques dorados a unas piñas bien abiertas para decorar la mesa de navidad aparte de unos portavelas realizados con anillas de lata de refrescos y decorados con espumillón fino. Ahh, y también mi primera vela con servilleta integrada con calor.

Mi primer Calendario de Adviento terminado. Un poco entrenido sí que fue, pero me ha dado mucha satisfacción.
Lo realicé sobre dos cartones forrados por plástico adhesivo amarillo. Encima formé un árbol con papel de embalar y sobre él comencé a colocar los "sobres" de cada día del Calendario, desde hoy mismo, 1 de diciembre hasta el próximo 25, día de Navidad.

Cada sobre está realizado con papel navideño variado de una cara y entintado con Vintage sepia. Los números son de goma eva. Dentro acabo de poner una moneda de chocolate. Qué bien me va a sentar cada día ese chocolatito….


Entremedias he pegado unos cuantos copos de nieve troquelados.

Junto con otras compañeras de manualidades, estoy comenzando a hacer las tarjetas navideñas. Aunque las dos que enseñé hace unas semanas, iban destinadas a ese tiempo, al final encontraron otro destino y ya están entregadas.

Así que ahora os enseño las dos nuevas que acabo de terminar.

Esta primera es un reto que nos propuso Roxana en el foro. Cada una interpretamos a nuestra manera la tarjeta que ella nos enseñó.





Ésta otra ya la tiene alguien que necesita un mucho de ayuda en su entorno familiar. Y, aunque no es verde esperanza, pensé que el azul cielo le vendría muy bien.

Por ahora, lo único que me sale es hacer pequeños trabajos, pero aún así, como están realizados por mi, son igual de importantes.

Una compañera me encargó un LO para hacer un cuadro de sus suegros y regalárselo a su marido. Con el papel que eligió, necesitaba poco más para decorarlo y éste es el resultado:


Como lo quería envejecido, entinté todo el papel, de forma desigual, con Distress Vintage Photo, incidiendo más en los bordes. Hice lo mismo con las fotos, colocadas sobre una cartulina texturizada verde que, aunque las hicieron en tono sepia, tenían un fondo demasiado blanco para lo que ella quería. Por último, le añadí un arabesco embosado de forma similar a los que lleva el papel para cubrir la esquina superior izquierda que quedaba demasiado vacía en comparación con el resto.


Una menudencia que acabo de hacer, y que no es scrap, son un par de tiestos en la parte de abajo de una botella de plástico. Además de la planta, evidentemente, únicamente le he añadido unos ojazos troquelados en goma eva. Como se aprecia en la foto, uno de ellos está sobre mi mesa de trabajo y el otro lo regalé a una compañera. ¿A que quedaron simpáticos? A todo el que lo ve, le sale una sonrisa al mirarlo. Aunque solamente sea por eso, merece la pena el haberlos hecho.

Acabo de hacer una tarjeta siguiendo el tutorial que me envió una chica de habla inglesa. Me gustó mucho su interpretación, diferente del pap que recibí. Y yo hice otra interpretación distinta.

Aquí la tenéis. Tiene una cartulina embosada sobre la tarjeta principal, todo ello entintado con Vintage Sepia, y decorado con una cinta de raso marrón y dos flores de ganchillo rematadas con un original botón que encontré olvidado en un cajón de la casa antigua de la familia.

Le hemos puesto ese título a una tarjeta que nos enseñó Marina, del foro de manualidades en el que estoy.

Acabo de terminarla y, aunque no es exactamente igual que el modelo, me gusta el resultado. Como ha dicho otra compañera, me ha salido "muy romántica". La idea inicial era otra, pero después de una sugerencia, el resultado cambió y quedó esto que veis.


He utilizado cartulina, hojas recicladas, puntilla, unas florecillas y papel de scrap transparente de corazones, además de goma eva blanca para hacer el perfil de la ventana.
Las hojas tienen un toque a pincel seco de glitter blanco con purpurina.

A falta de más inspiración en estos últimos meses, siguiendo un tutorial que me encontré hace poco, he empezado a forrar mis cajas de zapatos con trozos de papel de periódico, después darle una mano de gesso licuado al que le di un toque de pintura acrílica verde, y luego un sello embosado.

Aunque tengo más cajas forradas, éstas dos son las primeras completamente terminadas con su embosado y con todo el borde entintado.

Tengo una compañera con unos gustos muy franceses. Su marido es un español nacido en Francia y profesor de francés, así que ese idioma se respira en su casa.

Me enteré que suele llevar en el bolso siempre una pequeña libreta y quise hacerle una que le gustara. Le acompañé también una shopping list con el mensaje en el idioma galo.

Llevo mucho tiempo sin publicar ningún trabajo. Tampoco he hecho gran cosa. Ha habido una tarea más importante...

De todas formas, he ido haciendo alguna cosilla que os voy a enseñar ahora.

Los primeros son unos marcapáginas que hice para la niña de una amiga (su mamá se quedó con el que le había hecho antes) y el segundo el que hice para una gran amiga.




Estos tags, con su sobre a juego, hecho a partir de rollos de papel higiénico, los regalé a las compañeras de mi suegra en la residencia donde estaba. Se quedaron perplejas porque debe ser que no están acostumbradas a regalos "porque sí".

En el trabajo últimamente estamos teniendo muchas bodas. Desde que hice los detalles para los compañeros que se fueron y una tarjeta para otro, se han acostumbrado a que yo haga las tarjetas. Pero el problema es que me lo dicen el mismo día o de un día para otro y así es imposible.
En este caso, me lo dijeron el mismo día, así que embarqué en la faena a unos cuantos y entre todos organizamos ésta tarjeta.

Como no tenía material, utilizamos lo que había en el trabajo: una cartulina que entinté con una bolsa de té y luego chamuscamos; una impresión que buscó una compañera (la pareja de ratoncitos), la tela de saco que se me ocurrió por su trabajo muy de campo y la buena voluntad de todos los que me echaron una mano en que saliera algo simpático y decente a la vez.

Ambos novios son paleontólogos, así que les venía que ni anillo al dedo, nunca mejor dicho, lo que salió de las ideas de unos y otros.

Aprovechado el tirón de los marcapáginas que me encargaron, a la amiga que lo hizo y a su marido les hice unos tags que bien les pueden servir de marcapáginas.
No tienen mucho detalle, aparte del embosado (o repujado del papel) porque el tiempo estaba justo, pero aquí os los dejo.

Ella es Licenciada en Filología Hispánica, como yo, así que le encantan las letras. Con un troquel de libro y unas tiras de washis de texto se lo decoré.